París

Fue más allá de todos los límites, acosando sexualmente a la azafata que intentó razonar con él, la pasajera francesa que anoche trastornó el vuelo París-Atenas, obligando al piloto a realizar un aterrizaje de emergencia en Tesalónica.

Según Proto Thema, a pesar de su corta edad, la azafata reaccionó con calma y siguió el protocolo. Inmediatamente notificó al supervisor de cabina, quien a su vez informó al capitán. Sin embargo, el pasajero francés, sin inmutarse, siguió mostrando un comportamiento provocativo, no solo contra los miembros de la tripulación sino también contra los demás pasajeros.

"En un momento, comenzó a escupirnos mientras intentábamos pasarlo para ir al baño", dijo uno de los pasajeros.

Se observa que la azafata le dijo al capitán que el pasajero en cuestión no le parecía estar borracho cuando subió al avión porque estaba hablando por teléfono.

Según los informes, el capitán no abandonó la cabina, lo que posiblemente le dio al pasajero francés demente el derecho a continuar con su comportamiento provocador y agresivo. Fue necesaria la intervención de otros pasajeros para calmar la situación.

“Lo inmovilizaron y lo amarraron a su asiento, aunque era preferible encerrarlo en el baño”, dijo un experimentado piloto a Proto Thema.

“El incidente comenzó unos 45 minutos después de que despegáramos de París y hasta Albania lo tenían bajo control parcial”, dijo otro pasajero.

En el aeropuerto de Tesalónica, 10 policías lograron sacar el pasaporte del francés del bolsillo. De hecho, la policía descubrió que se había defecado encima y le pidieron que se cambiara de ropa antes de bajar del avión.

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